viernes, 6 de mayo de 2011

Post extraño-improvisado y una foto bien bonita.

Hace mucho que no escribo nada acá, básicamente por pinche desidia.
Estoy desempleada de nuevo, duré poco en ese trabajo pero el tiempo suficiente para comprender muchas cosas. Por ejemplo, que la mayoría de la gente es histérica de mierda, que las grandes empresas son una mafia... meh, en realidad ahora que lo pienso son puras madres que ya sabía, de modo que me sirvió para repasar lo elemental. Solamente hay algo que pude comprender y se me manifestó de manera tan clara que me dieron ganas de pararme de la silla, renunciar e ir a mi casa corriendo a hacer mis maletas: No estoy hecha para hacer algo que NO me gusta. Elegí la profesión que elegí y pude haber elegido otra (relacionada con las otras cuatro gracias que se hacer) pero mi elección fue correcta.

Sin embargo, me percaté de que uno no siempre tiene la oportunidad y los recursos para seguir haciendo lo que a uno le gusta. Yo, por ejemplo, me aventuraré a irme a México, D.F. y llegaré allá con $6.00 en un bolsillo y las esperanzas en el otro... pero ¿Y los que ni esa posibilidad tienen? ¿Y los que se mataron cuatro o cinco años en una carrera para terminar siendo empleados de cualquier tienda, monos de aparador, taxistas, taqueros, etc.? Cualquier trabajo es digno, no estoy pinches mal criticando nada. Lo que me parece incongruente es que la gente se quede ahí en la zona de confort sin mover un dedo por sus sueños y ya jamás haga nada. En este momento yo estoy a todísima madre viviendo en casa de mis papás, sin pagar renta, ni comida, ni recibos, ni el puto champú con el que me baño todos los días. Pero por ende, tengo que llegar temprano a la casa, ayudar a limpiar de vez en cuando, atenerme a sus reglas... y pues ya estoy muy ruca y ya viví mucho tiempo sola como para acostumbrarme a eso. Sí, es una zona de confort muy a todísima madre, ya lo dije, pero yo no quiero eso.

Y bueno, terminé toda shockeada y en el punto en el que empecé desde que regresé del D.F. pero ahora tengo más pánico... tengo pánico de todo. El pensamiento de no poder realizar lo que quiero hacer con mi profesión no me deja dormir en las noches. Me volvió el insomnio, tengo cuadros de depresión, tengo mucho pánico. Luego me controlo y me digo a mi misma que todo va a estar bien. Todo bien. Luego vuelvo a pensar. Como verán, tengo muchas cosas en la cabeza.

Faltan dos meses para que me vaya y ahora más que nada trato de prepararme psicológicamente, ya sé cómo es la vida allá. Estoy dando vueltas persiguiéndome la cola a cada rato, pensando y pensando.

Y ya hablando de cosas padres y bonitashermosaschulas, tengo un boleto para ver a RUSH en El Paso, Tx. el 14 de Junio y junto a eso, todo lo demás que leyeron en este post vale como tres pitos y medio. Soy feliz, lloro, de emoción :')




Mi vida vale madres en este momento pero no importa porque voy a ver a RUSH.
(No encontré otra foto en la que estuvieran más sonrientes, hermosos y optimistas)


Ya me voy a dormir.


P.d. Ya me di cuenta que soy adicta a internet. Valgo madres.

P.d. 2 Los amo mil... ni sé quiénes son, ni nada, pero igual.





Ride, Sally, Ride... dice el señor Lou Reed.


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