sábado, 28 de agosto de 2010

Despedida.

Pues por aquellos azahares del destino, me tocó dirigir el mensaje de despedida de mi generación en la ceremonia de graduación del Ibart UACH. Lo comparto:


El arte: idea, emoción, expresión, obra pero sobre todo necesidad del ser humano. Mas que ir a una escuela a aprender una serie de convencionalismos llegamos al Instituto de Bellas Artes en busca de conocimientos y herramientas para satisfacer la necesidad de crear, de dar a luz productos de nuestra imaginación y nuestro sentir.
Cinco años hace ya que llegamos a esta institución, llenos de curiosidad, expectativas y la fime intención de dedicarnos a despertar emociones humanas y mostrar nuestra visión de las cosas. Dedicarnos a hacer Arte.

Fueron cinco años de crecer, aprender y construir sueños en el futuro. Hoy estamos de pie frente al marco de la puerta que nos dará la salida al mundo, ha llegado el momento de salir a hacer Música, Artes Plásticas, Danza y Teatro.
Recordemos un poco nuestros primeros días en el Instituto de Bellas Artes, repasemos mentalmente la primer clase, el primer maestro, la primer impresión que tuvimos de nuestros compañeros. Recorramos imaginariamente nuestra primer excursión por los pasillos de la escuela, la admiración que sentíamos por los compañeros de semestres superiores. La sensación de estar ahí, justo donde queríamos estar. Ese momento en el que el camino parecía tan largo y este momento tan lejano. Los trabajos, las lecturas, las clases, los maestros, los ensayos que se volvieron parte de nuestra cotidianeidad, el final del semestre en el que las noches sin dormir se volvieron una constante para preparar minuciosamente cada pequeño detalle del examen semestral. Recordemos todos esos pequeños detalles para nunca olvidar que estudiamos carreras verdaderamente maravillosas en las que las horas extraclase incluso llegaban a superar el tiempo que pasábamos en las aulas.

Sí, llegar aquí no ha sido nada fácil pero no hubiéramos podido lograrlo sin la ayuda de los guías, los maestros que nos orientaron a lo largo del camino. Ellos nos instruyeron y a la vez nos generaron nuevas curiosidades que nos encaminaron para adquirir los conocimientos necesarios tomando siempre en cuenta que más que enseñarse, el arte se vive y se consolida en la mente del creador.
El apoyo de nuestras familias ha sido otro factor importante a lo largo de nuestro estudio. Muchas veces no importaba quién fuera nuestro público si teníamos a los miembros de nuestra familia como principales espectadores de nuestros conciertos, recitales, espectáculos, exposiciones y obras.

Recordemos todos esos detalles, esos momentos para recuperar el espíritu voraz con el que empezamos la carrera. Hoy estamos a punto de culminar un ciclo y el día de mañana comenzaremos uno nuevo siendo Licenciados en Música, Artes Plásticas, Danza y Teatro. Como creadores de arte tenemos un gran compromiso con la sociedad. En una época en que la violencia y el caos parecen apoderarse de todo, tenemos que utilizar nuestros conocimientos para crear obras que logren transgredir la conciencia y sacudir los desgastados ánimos de nuestra sociedad. No debemos perder nunca nuestro objetivo y nuestro amor por lo que hacemos. Romper esquemas, innovar, transformar, crear, difundir y trascender, es para lo que estamos hechos. Debemos tener la fuerza y la capacidad de difundir la cultura y si no podemos hacer de este un mejor país, al menos nunca cansarnos de intentarlo.




jueves, 12 de agosto de 2010

El soundtrack de mi vida.

La música es muy importante para mí. No concibo un día de mi vida sin escuchar música, es parte de mi cotidianeidad. Uno de mis días normales está cubierto por música por lo menos en un 70% -sin contar lo que escucho involuntariamente-.
Aquellos que tienen una convivencia más cercana conmigo, seguro me recuerdan con los audífonos puestos o colgando del cuello y saben que antes de estar inmiscuida en un ambiente ruidoso y lleno de gente, prefiero ir y arrinconarme teniendo como única compañía el iPod y mis chingos de música.

No es raro que yo presente este comportamiento ya que mi papá escucha música desde que abre los ojos hasta que se acuesta, abarcando desde The Beatles, Creedence Clearwater Revival, Mozart, Pavarotti hasta Vicente Fernández, José Alfredo Jimenez, Los Cardenales de Nuevo León, Joan Sebastian, etc. Tiene colecciones impresionantes de acetatos, más de 1000 cassettes y ahí la lleva con los cds.
Mis hermanos tienen el mismo gen de tendencia adictiva a la música que nos ha legado mi padre. Mi hermana mayor escucha música pop en general y mi hermano escucha música norteña, onda grupera, corridos. Esta diversidad dentro del hogar me dejado una cultura musical general y lo más importante, el aprendizaje de la tolerancia hacia los gustos de los demás.

Desde muy pequeña tuve mi primer grabadora en la que escuchaba mi cassette de Cri-cri el grillito cantor. Lo escuchaba todo el tiempo al grado de volver locos a todos en la casa, hasta que un buen día esa cinta desapareció misteriosamente. Luego tuve mucha influencia de lo que escuchaba mi hermana en pleno comienzo de los 90's. Compartir recamara con ella y su adolescencia me provocó escuchar por primera vez canciones como "Total Eclipse of the Heart" "More than words" "Wind of Change" (Todavía me acuerdo, quihubo?) entre otras. Y así seguí mi camino musical recolectando gustos de algunos grupos que estaban de moda por aquellos días. Así sin pena he de decir que de niña me gustaba Hanson y las Spice Girls. Ni pedo, no nací "rockera". Luego llegó MTV a mi vida -a mí todavía me tocó cuando era "Music Television" y no el "Empty vi" que es ahora- conocí a Deftones, Korn, Godmack y desde ahí me dediqué a explorar los orígenes del rock y sus múltiples ramas y a consolidarlo como mi gusto... como uno de los amores de mi vida.

Como muchos, también tuve mi etapa de intentar hacer música y ejecutar un instrumento musical. Para no hacer la historia muy larga, pronto comprendí que estoy algo impedida para ello y que lo mejor era dedicarme de lleno a escuchar y disfrutar de ella así nada más. Lo único que hago de vez en cuando es cantar en la regadera o en el peor de los casos, mientras camino por la calle, lo cual me ha generado miradas feas e incómodas.

Hasta la fecha he escuchado muchas bandas, muchos discos. He explorado otros géneros musicales y adoptado algunos grupos que le han dado una pizca de variedad a mi gusto musical. He formado una modesta colección de cds, dvds de conciertos (a pesar de las facilidades de la era de la tecnología, trato de consumir) y desde luego, archivos mp3.
Amo intensamente la música, soy adicta a ella. Pese a esto, no me considero "melómana" y el término en sí hasta me da un poco de comezón.

Por aquello de que no me separaba del walkman/discman y ahora no me separo mi novio el iPod, muchos de los mejores momentos de mi vida han estado involuntariamente musicalizados y esas canciones han pasado a formar parte del soundtrack de mi vida.


Les comparto algunas:

Us and theme - Pink Floyd

Hardluck woman - Kiss

November Rain - Guns n' Roses

Rock 'n' roll suicide - David Bowie

Fear of the Dark - Iron Maiden


D'Yer Mak'er - Led Zeppelin

Wearing the Inside Out - Pink Floyd


Aperlae - Ataraxia

Near Dark - Agathodaimon


Y ya.

Gracias, vuelvan pronto.




domingo, 1 de agosto de 2010

Soñar

Soñar es delicioso. Simple y sencillo. Soñar el sueño y soñar la realidad. Soñar dormido o soñar despierto... soñar. Abrir los ojos, pensar. Trasladarse, abstraerse, viajar. Cerrar los ojos. Soñar lo imposible, lo lejano, lo ausente. Tan rico que es soñar. Imaginar el sueño, volverlo realidad. Ambicionar, ir lejos. Esbozar el presente, el futuro. Es posible, es posible soñar...



Tengo sueños muy grandes cuando estoy dormida, gigantes cuando estoy despierta. En los últimos días he estado elaborando una especie de "plan general" que definirá el rumbo de mi vida. Digo plan general, porque no podré descartar pequeñas situaciones que se me presenten en la vida. Evito planear el más mínimo detalle del futuro y sólo tengo un trazo generalizado que puede variar y modificarse. No estoy segura de nada de lo que haré. Tengo ideas. Sueño y ambiciono demasiado.

Después de tanto soñar, creo estoy en el momento justo de salir y hacer realidad todo eso. Intentar una y otra vez llevar a cabo mis proyectos, aunque en mi mente parezcan simples quimeras. Intentar e intentar hasta el cansancio, sin renunciar.

Hay quien ya no sueña. Se conforma, se limita. Teme arriesgarse. Se queda en un punto. Inmóvil. Hay quien ya no fantasea y vive tanto en la realidad que no se permite perderse un momento e imaginar. Evadirse, construir un sueño, visualizarlo. Hay quien sólo sueña y se pierde... hay sueños que se pueden realizar. Y ¿por qué soñar sólo por uno? Se puede soñar por un país, por un mundo, por una sociedad. Desmenuzar, destruir, reconstruir por medio de un sueño una nueva realidad.

Dream On, Julia Dream, Baby Dream in Cellophane, Sweet Dreams, Stupid Dream, Dream Evil, Foreclosure of a Dream, When I Live my Dream, Sleep of No Dreaming, An Occasional Dream, Wrap your troubles in Dreams, Dream Lover, See you in your Dreams, Wildest Dreams, Caught in a Dream, Dirty Dream, Nice Dream, Rock and Roll Dream, Rainy Day Dream Away, The Post war Dream, Infinite Dreams, Dreams are Free, Dreaming of me, Dreamtime, Dreamer...

Los sueños están ahí, esperando a que uno los convierta en realidad.


LA SOÑADORA EMPEDERNIDA.